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¿Sabes si tu niño o niña lleva el calzado adecuado? ¡Compruebalo aquí!

No todos los calzados son recomendables a ciertas edades, dependiendo de la edad del niño deberá utilizar un tipo de calzado u otro.

Muchas veces calzamos al niño incluso antes de empezar a andar, el pie en esta etapa está formado prácticamente por cartílago, por lo que el calzado puede influir en el crecimiento del mismo. Por eso el calzado infantil que utilicemos tiene que ayudar al desarrollo físico-Motor del niño y  cumplir con las características específicas de la actividad que va a desarrollar el niño a la etapa a la que pertenece. Un calzado que NO reuna estas características puede ser contraproducente en la salud del niño y ocasionar problemas graves que le acompañen hasta la madurez.

¿ Cada cuánto tiempo tenemos que revisar el calzado?

Edad del Niño Frecuencia Recomendada de Cambio/ Revisión de Calzado
0 a 1.5 cada 2 meses
1.5 a 2.5 cada 3 meses
2.5 a 4 cada 4 meses
4 a 6 cada 6 meses
6 a 9 cada 3 a 4 meses
10 a 20 muy variable, cada 4 a 6 meses

¿Cómo tiene que ser el calzado en cada Etapa del niño?

  • Etapa de predeambulación (0 – 18 meses)

    el niño aún no ha comenzado a andar y su pie le sirve para explorar el entorno. La función del calzado en esta etapa es exclusivamente de protección contra el frío, la humedad y los golpes. Esta etapa la podríamos dividir en

    • Etapa de pre-gateo , en la que el bebé sólo es capaz de incorporarse, permanecer sentado y rodar, y en etapa de gateo , en la que el bebé comienza a desplazarse y dar sus primeros pasos.
    • Etapa de adquisición de la marcha (1’5 – 3 años), el niño comienza a andar de forma irregular, con problemas para mantener el equilibrio y caídas frecuentes. El calzado debe tener una suela flexible para permitir que el niño «sienta el terreno» para favorecer un buen desarrollo del sistema nervioso y mejorar el equilibrio. Es la etapa de crecimiento más rápido de los pies.
  1. La holgura interior en el largo debe ser de unos 10 mm.
  2. La puntera debe ser redonda o cuadrada, vista desde arriba, y redondeada por el lateral. Debe, además, ser cerrada con un refuerzo de cierta rigidez para la protección de los dedos.
  3. El material de corte debe proporcionar flexibilidad, protección contra el frío y transpirabilidad.
  4. El abrochamiento debe ser alto sobre el empeine con una lengüeta de piel suave.
  5. Se recomienda un calzado con caña blanda y flexible, con un ajuste suave, para mantener el talón dentro del calzado.
  6. La suela debe ser plana (no más de 3 mm). No debe ser muy blanda, pero si muy flexible en la zona de los dedos y con características moderadas de fricción. En caso de tener tacón, la altura máxima debe estar entre 3 – 5 mm.
  7. El forro debe presentar cierto agarre para evitar deslizamientos del pie y el calzado. El interior debe ser suave y blando, sin costuras internas. Se desaconseja la inclusión de un contrafuerte rígido y de elementos anatómicos.
¡MUY IMPORTANTE!
PARA EL NIÑO ES ACONSEJABLE ANDAR MUCHO TIEMPO DESCALZO POR TERRENOS DIVERSOS. LA MARCHA SOBRE UN TERRENO INCIERTO (ARENA,GRAVA, UN PRADO, TIERRA) ES RICA EN ESTÍMULOS GENERADORES DE REFLEJOS, QUE INDUCEN UN VIVO JUEGO DE LA MUSCULATURA DEL PIE CON ÓPTIMOS EFECTOS TONIFICANTES EN UN PIE NORMAL E INCLUSO TERAPÉUTICOS EN UN PIE DÉBIL. EN CAMBIO, LA MARCHA EN UNA SUPERFICIE PLANA Y LISA COMO LA DE CASA, NEUTRA Y CARENTE DE INFORMACIONES, NO PROCURA SENSACIONES NI ESTÍMULOS Y PUEDE LLEGAR A DETERMINAR LAXITUD EN UN PIE CON PEQUEÑAS INSUFICIENCIAS.
  • Etapa de maduración de la marcha (4-7 años)

    Ya anda de forma independiente hasta que alcanza el patrón de marcha adulta. Es una etapa de mucha actividad para el pie, por lo que el calzado debe evitar lesiones e impedir que sufra ninguna patología.

  1. La holgura interior en el largo debe ser entre 10 y 15 mm.
  2. La puntera debe ser redonda o cuadrada, vista desde arriba, y redondeada por el lateral. Debe, además, ser cerrada con un refuerzo de cierta rigidez para la protección de los dedos.
  3. El material de corte debe proporcionar flexibilidad, protección contra el frío y transpirabilidad.
  4. El abrochamiento debe ser alto sobre el empeine con una lengüeta de piel suave. Se recomienda un cierre de fácil manejo tipo velcro.
  5. En caso de que el calzado tenga caña alta, ésta debe ser blanda y con el borde superior acolchado. Debe, además, ser más estrecha por la parte del tobillo y más ancha en la parte del talón.
  6. La suela ha de ser flexible. Debe tener un espesor continuo entre 5 y 10 mm y ser de un material no demasiado duro, con ligeras propiedades de amortiguación. La altura máxima de tacón ha de estar entre 5 y 10 mm. Materiales como la goma o el PU pueden aportar las características adecuadas.
  7. Se aconseja la inclusión de un contrafuerte rígido.
  • Etapa de aumento de actividad (7-14 años)

    el patrón de marcha adulta está establecido, se intensifica considerablemente la actividad deportiva, por lo que el uso del zapato deportivo empieza a tener sentido. En esta fase entran también valores de moda que pueden determinar el tipo de calzado aunque no siempre el adecuado

  1. La holgura interior en el largo debe ser entre 10 y 15 mm.
  2. La altura de tacón no debe sobrepasar los 10 mm en niños de 7 a 10 años. Entre 10 y 14 años, esta altura no debe sobrepasar los 15 mm en los niños, y los 20 mm en las niñas.
  3. La puntera debe ser redonda o cuadrada, vista desde arriba, y redondeada por el lateral. Ha de ser, además, cerrada con un refuerzo de cierta rigidez para la protección de los dedos.
  4. El material de corte debe proporcionar flexibilidad, protección contra el frío y transpirabilidad.
  5. Es conveniente que el abrochamiento sea alto sobre el empeine con una lengüeta de piel suave.
  6. En caso de que el calzado tenga caña alta, ésta debe ser blanda y flexible con un ajuste delicado para mantener el talón dentro del calzado.
  7. Se aconseja que lleve incorporado una entresuela de espesor mínimo de 15 mm con buenas propiedades de amortiguación y resistente a la abrasión.
  8. El forro ha de ser rugoso en la zona de contrafuerte para evitar el destalonamiento del calzado

 

Información obtenida del Instituto de Biomecánica de Valencia

Jose Manuel Manrique de Torres

Podólogo colegiado nº 2902calzado infantil

manriquedetorres noviembre 17, 2017